Dicen que si escribes inclinándote hacia abajo es que eres pesimista, o llevas un mal día; y que, si escribes inclinándote hacia arriba eres positiva, o te encuentras feliz. Pues yo escribo siempre recto, ¿ sabéis porqué? Porque yo, no tengo malos ni buenos días, simplemente tengo días que deseo que acaben o que sean eternos. También suelen decir que tener una letra clara y limpia es señal de ser ordenada; y esto tampoco es del todo cierto..Porque yo tengo una caligrafía bastante buena y soy el desorden en persona. Esto es sólo una forma de demostraros que no todo es lo que parece, que no siempre una sonrisa es signo de felicidad, que aveces una sonrisa sólo sirve para esconder una lágrima. Yo soy de las típicas personas que utilizan sus mejores sonrisas para esconder sus peores días. Siempre procuro mostrarle a la gente que me río del mundo, que soy de hierro, que nunca me duele nada, que tengo el corazón de hielo y que nunca me verán llorar. Aunque luego llegue a mi casa y me meta en la cama y no pare de llorar, hasta caer rendida. Pero a mí jamás nadie me verá rebajarme, ni mucho menos hundirme.
Y SÍ, es cuestión de orgullo, no lo niego; es cierto que por ser tan orgullosa he perdido muchas cosas en la vida, pero también es cierto que gracias a mantener mi orgullo por encima de todo es que conseguir lo que me propongo.